Sinceramente: no conozco ninguna organización que haya llegado a esta meta en el desarrollo del propósito. Si eres una de ellas o la conoces, por favor! Ponte en contacto conmigo y cuéntame!
Por mi parte, en https://maldonado.es/ estamos en el camino. Ellos mismos os explicarán más adelante…
Creo que esta integración es la expresión del máximo potencial alcanzable con el trabajo del propósito. Cuando un individuo siente que su propósito vital está alineado con el de la organización en la que trabaja, algo les une más allá de lo que siempre hemos pensado que es importante en un trabajo. Es una conexión recíproca que beneficia a ambas partes, empresa e individuo.
Marcet lo decía en un artículo el otro día: vienen años en los que todo va a seguir cambiando muy rápidamente. Las grandes corporaciones con miles de empleados numerados, seleccionados para ser dirigidos hacia una tarea automática y sin margen para la creatividad, entendiendo la estructura operativa como una maquinaria que debe funcionar fríamente y no como una entidad en movimiento, orgánica y con procesos humanos (sentimientos, situaciones, relaciones, etc) están destinadas a ir desfalleciendo. No van a tener ni la visión ni la agilidad para dar respuesta a los desafíos que este nuevo paradigma que ya está aquí nos plantea.
Vamos a necesitar equipos más pequeños, profesionales independientes, maduros y con un alto grado de autogestión. Grupos de trabajo que reconocen que el desarrollo personal del individuo es lo que más suma al conjunto.
Porqué también va a cambiar el concepto que hemos tenido hasta ahora de lo que es un equipo. El modelo de tribu (todos a una!) se va a descubrir como castrador, donde los talentos individuales se esconden ya sea porqué entre tanta unión se difuminan como porqué unos no permiten que otros destaquen.
El propósito particular va a ir ampliando su importancia. Aunque no nos hayan enseñado a descubrirlo (pregunta a quien quieras cual es su propósito y verás) los jóvenes van a necesitar reconocerlo para sentirse plenos. Tendrán en cuenta ese propósito a la hora de decidir a quien aportan su talento.
Nuevos tiempos, que bien. Tiempos que nos van a mostrar que la evolución no era ni nunca fué solo tecnológica. Que la evolución también va del avance de la tecnología interior (cerebro, corazón, sistema neuronal de ambos, os suena?). Es mi frase preferida del amigo Marcet «La innovación está en la mirada». Olé!