Autogestión vs. Autoestima

He observado un error fundamental en la percepción de algunos Ceos cuando dicen que necesitan que las personas de su equipo sean más proactivas. O afirman que quieren un equipo autogestionado.

Por una parte, ocurre que ven claramente que el futuro de la efectividad y la rentabilidad de cualquier organización pasa por ahí.

Y por otra, creen que así ellos estarán más liberados, serán más felices o sentirán menos presión.

Pero lo expresan desde un tono de exigencia y de reclamación hacia el equipo porque consideran que algunas personas no tienen suficiente espíritu o ambición.

Entonces nos encontramos con una paradoja.

Porque es cierto que hay personas que parecen no tener espíritu de mejora ni interés en aprender o mejorar como profesionales.

Y esta realidad da argumentos para seguir creyendo en este discurso en el cual son las personas las que no tienen lo que hay que tener y poco se puede hacer con eso. 

Pero a la vez y he aquí la paradoja, cada persona sin excepción tiene un talento, una habilidad y un foco de interés en su vida sin el cual no podría seguir viviendo.

No nos han enseñado a valorarnos a nosotros mismos. Tampoco a descubrir nuestros talentos y darles el valor que tienen.

Más bien al contrario, a muchos de nosotros se nos ha educado desde un paradigma de control del comportamiento, en el que equivocarse es señalado, ridiculizado y/o castigado.

Y eso está muy alejado de entender el error como información valiosa que nos muestra lo que nos falta para seguir mejorando.

Comprensión que es fundamental para poder aplicar con éxito una verdadera Autogestión. 

Tampoco se nos ha dado el crédito ni siquiera en nuestros ámbitos más privados de expresarnos libre y auténticamente.

Con toda esta programación que llevamos dentro…

¿Cómo puedes expresar libremente tu aporte más auténtico y brillante en la empresa?

¿Cómo puedes convertirte en ese virtuoso de tu instrumento de la banda de jazz, que no pregunta a nadie cómo ha de tocar, que no necesita supervisión cuando está improvisando ni preguntar qué es lo que tiene que hacer a continuación?

No es fácil, no nos engañemos. Porque la autoestima de la que partimos no es muy alta, en la mayoría de casos. Y la autogestión la requiere.

¡Entonces también es una enorme oportunidad!

Porque si eres empleado y te encuentras con dificultades tipo:

  • No atreverte a expresar
  • Miedo a tomar una decisión
  • Te sientes mal si alguien critica tu trabajo, etc

Vas a poder ver esa falta de autoestima y hacerla crecer. 

Y si eres Ceo vas a poder ayudar a las personas a atravesar viejas creencias y expandirse como profesionales y como personas.

Al mismo tiempo que ves como tu empresa crece en efectividad, rentabilidad y plenitud compartida.

¿Hay cosa más hermosa que convertir un proyecto empresarial en, además de ser un negocio, un lugar de evolución para tod@s los que estáis en ella?

Crecer en autogestión implica inexorablemente crecer en autoestima.

  • Entender el error como una oportunidad de aprendizaje y no como una equivocación propia.
  • Saber que estés en la esfera que estés de la organización, tu aporte es fundamental.
  • Y percibir que formas parte de un ecosistema (la empresa) con un propósito evolutivo, te brindará un sentido más profundo a tu trabajo del día a día.

Mi deseo para ti, es que así sea!